PAN SIN LEVADURA

Otro elemento clave en el proceso de libertad del pueblo de Israel fue el comer PAN SIN LEVADURA.

Para poder entender el porqué de dicha instrucción, iniciemos identificando que es la levadura.

“La levadura, llamada también fermento, está compuesta por hongos microscópicos que se encargan de realizar la descomposición de distintos alimentos como azúcares o carbohidratos”.

En pocas palabras, la levadura es un elemento externo que, al ser añadido a la masa, se mezcla con ella y la modifica, es decir, la fermenta.

Leamos Éxodo 13:3 “Y Moisés dijo al pueblo: Acordaos de este día en que salisteis de Egipto, de la casa de esclavitud, pues el SEÑOR os ha sacado de este lugar con mano poderosa. No comeréis {en él} nada leudado.”

Éxodo 12:15-20 “Siete días comeréis panes sin levadura; además, desde el primer día quitaréis toda levadura de vuestras casas; porque cualquiera que coma algo leudado desde el primer día hasta el séptimo, esa persona será cortada de Israel. 17… guardaréis este día por todas vuestras generaciones como ordenanza perpetua. 19 Por siete días no habrá levadura en vuestras casas; porque cualquiera que coma algo leudado, esa persona será cortada de la congregación de Israel, ya sea extranjero o nativo del país. 20 No comeréis nada leudado; en todo lugar donde habitéis comeréis panes sin levadura».”

Como podemos ver, Dios al darles la instrucción de no comer panes sin levadura, lo que les estaba diciendo realmente es que el diseño perfecto creado por El para la humanidad, NO TOLERA MEZCLAS EXTERNAS puesto que la masa, en este caso la persona, pierde la autenticidad y la fidelidad al modelo. Y estando en esa condición, el propósito se afecta gravemente.

¿Pero de qué mezclas estamos hablando?

Un primer ejemplo es el pecado, por tanto, es imprescindible aborrecerlo. Recordemos, el dejar el pecado no es un proceso. El que ha nacido de nuevo es nueva criatura. El que es nacido de Dios, no practica el pecado. Otros aspectos son: el sistema cultural, la tabla de valores de este mundo. Razonamientos humanos que intentan comprenderlo todo de manera natural, es decir, obtener conocimiento dependiendo de los sentidos, la lógica, negando el poder sobrenatural de Dios y la intervención del Espíritu Santo. Pensamientos que dicen que lo más importante es el hacer y no el ser, es decir, vivir de las apariencias, del confiar en las propias fuerzas, orgullo, división, murmuración, etc.

Como podemos ver, la levadura en este contexto significa, contaminación. De modo que el abandonarla no es una sugerencia, sino un mandato del Señor pues de ello dependerá toda nuestra producción.